28 de junio

Hoy, en el Día del Orgullo, debemos enfrentar una creciente amenaza: la ascensión de Vox en puestos políticos importantes como Valencia, Aragón y Baleares. Este partido, conocido por su postura lgtbfóbica, representa un peligro para la igualdad y los derechos LGBTQ+. La prohibición de banderas LGTBI y las amenazas a quienes las exhiben en sus balcones son claras muestras de su intolerancia. Además, su lona del odio en Madrid, explícita en su discriminación hacia la diversidad, evidencia su verdadera agenda.

Las agresiones contra personas LGBTQ+ han experimentado un alarmante aumento en los últimos años, incrementándose en un 70% según las estadísticas de 2022. Estos preocupantes datos están estrechamente ligados al discurso de odio promovido por Vox, mientras el Partido Popular (PP) adopta una postura tibia y permisiva hacia estas peligrosas ideas.

Es inadmisible que Vox defienda abiertamente terapias de conversión, prácticas que violan los derechos humanos y perpetúan la discriminación y el sufrimiento de nuestra comunidad. Resulta aún más desconcertante que el PP no condene claramente esta posición retrógrada, a pesar de su supuesta defensa de los avances sociales. Han votado en contra de propuestas de igualdad y derechos LGBTQ+ e incluso han llevado el matrimonio igualitario al Tribunal Constitucional, evidenciando su verdadera postura.

Vox y su bandera de una España en blanco y negro representan una regresión hacia tiempos oscuros. En este día, debemos reivindicar, luchar y celebrar, pero también recordar que el 23 de julio es el día para enfrentar a estos infames votando. Unidas, podemos resistir y construir una sociedad inclusiva y respetuosa. En el Día del Orgullo, alzamos nuestra voz contra la intolerancia y afirmamos nuestro compromiso con la igualdad. ¡No permitamos que Vox detenga nuestro avance!